Gran Manzana: obra experimental en ladrillo
El arquitecto Pablo Moreno Escobar, quien fue el encargado de diseñar el edificio Gran Manzana, ubicado en la Calle 32 con Carrera 13, en Bogotá, experimentó con un ladrillo colo tierra para crear una nueva textura en la ciudad.
Moreno señala que diseña en larillo porque es un material muy noble, su comportamiento de estabilidad, el poco mantenimiento que necesita, su dureza, las texturas que produce en fin, son difíciles de encontrar en otros materiales de más tecnología.
El arquitecto agrega que Gran Manzana se diferencia de otras edificaciones en ladrillo del centro de Bogotá en que por lo general tienen una fachada que es una radiografía del interior, acá lo que buscamos es generar unas texturas de fachada, son rayas horizontales que van subiendo hasta el cielo, entonces eso hace del el edificio otra dimensión dentro del espacio, desde el exterior lo que se ve son las bandas de ladrillo que es como una arte óptico.
Finalmente Moreno indica sobre el color tierra de la edificación de 16 pisos que: ladrillos de colores hay muchos, de diferentes minas, es una gran posibilidad arquitectónica, el color tierra del ladrillo de Gran Manzana se utilizó para dar una impresión natural, ecológica, que contrasta con las montañas, nos parece que complementa el paisaje urbano de toda esta zona.