¿Cómo afecta la lluvia en la construcción?

La lluvia afecta construcciones al erosionar cimientos, filtrarse en estructuras y causar humedad, daños que a futuro comprometen la estabilidad

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En el sector constructor la exposición a condiciones climatológicas adquiere una gran relevancia, pues muchas de las tareas se realizan a la intemperie, lo que supone que los trabajadores estén expuestos durante una parte de la jornada laboral a condiciones muy variables y, en algunos casos, extremas, como frí­o o calor intenso, viento, lluvia, radiaciones solares, etc.

Cuando se producen precipitaciones de lluvia o granizo los trabajos pueden verse afectados haciéndose más complejos y peligrosos, pues se reduce la visibilidad, se dificulta el tránsito de vehí­culos y trabajadores, etc. Además, cuando ocurren de forma persistente pueden producir el deslizamiento o desprendimiento del terreno, lo que afecta especialmente a trabajos como excavaciones.

En el caso de que haya tormentas eléctricas, existe riesgo de caí­da de rayos en la zona de trabajo, con la consiguiente posibilidad de que se produzcan daños, tanto para los trabajadores como para las instalaciones eléctricas.

 

Cómo afecta la lluvia en una construcción

Las lluvias pueden tener un impacto significativo en una obra de construcción. El agua puede infiltrarse en las estructuras, causar daños en los materiales, dificultar la realización de ciertas tareas y comprometer la seguridad en el sitio de construcción. La lluvia excesiva puede provocar inundaciones, erosión del suelo y retrasos en el cronograma de trabajo. Por lo tanto, es crucial tomar medidas preventivas y de protección adecuadas para salvaguardar la obra durante la temporada de lluvias.

Infiltraciones de agua

Las lluvias intensas pueden filtrarse a través de grietas, juntas o techos defectuosos, lo que puede causar daños en las estructuras y afectar la integridad de los materiales.

Erosión del suelo

Las lluvias fuertes pueden provocar la erosión del suelo al arrastrar el material suelto, lo que puede debilitar la base de la construcción y afectar su estabilidad

Humedad y condensación

La presencia constante de humedad debido a la lluvia puede generar problemas de condensación en las paredes y techos, lo que puede propiciar el crecimiento de moho y hongos, dañando tanto la salud de los ocupantes como la estructura misma.

Daños en la cubierta

La lluvia puede desgastar y deteriorar los materiales de la cubierta, como las tejas, láminas o impermeabilizantes, lo que puede ocasionar filtraciones y goteras en el interior de la construcción.

Crecimiento de vegetación indeseada

Las áreas expuestas a la lluvia constante pueden propiciar el crecimiento de vegetación no deseada, como musgo o algas, en las superficies exteriores, lo cual afecta la apariencia estética de la construcción.

 

¿Cómo almacenar materiales en obra en época de lluvias?

 

Es fundamental manejar adecuadamente el suministro, almacenamiento, transporte y disposición de los materiales requeridos por la obra: arena, rellenos y triturados, hierro, prefabricados, ladrillos, adoquines, etc. Los materiales de construcción que llegan a la obra deben ser dispuestos en los sitios establecidos para ello, generalmente en los patios de acopio del campamento, los cuales deben estar dotados de las estructura hidráulica retenedora de sólidos para cuando se presenten lluvias no arrastren sólidos que puedan contaminar los cuerpos de agua.

El almacenamiento de los materiales se debe realizar de acuerdo a su naturaleza y volumen y deberá estar debidamente señalizado e identificado. En caso de requerir la utilización del espacio público para el almacenamiento temporal de escombros o materiales de construcción, el cual no puede ser superior a 24 horas, la zona debe ser delimitada, señalizada y acordonada, de tal forma que se facilite el paso peatonal o el tránsito vehicular de manera segura y ordenada.

Estos materiales deberán estar apilados y totalmente cubiertos, para evitar su dispersión por acción del agua o el viento. Los materiales pétreos y granulares almacenados temporalmente en los frentes de trabajo deben estar protegidos contra la acción erosiva del agua, aire y evitar contaminación de los mismos. Durante el almacenamiento los materiales granulares deberán estar cubiertos con polietileno o cualquier otro material impermeable.

 

Insumos y otros materiales

Por seguridad y calidad de materiales, el almacenamiento de materiales como cemento, tuberí­as, hierros, etc., debe realizarse realizarse preferiblemente en el almacén dispuesto para esta actividad en el sitio de campamento de la obra. El almacenamiento de estos materiales se pordía adelantar de la siguiente manera:

Cemento 

Se colocará sobre una cama en estibas de madera que garantice su protección contra la humedad.

Hierros

Su almacenamiento se hará en el campamento y de manera temporal en los frentes de trabajo de acuerdo con la programación de obra.

Tuberí­a

Para su almacenamiento se construirán "burros" en varas limatón donde se clasificarán de acuerdo al tipo y diámetro.

Pinturas

El almacenamiento se adelantará en estanterí­as debidamente ventilados e identificados de acuerdo con el tipo de producto almacenado. Se deberá revisar el lí­mite de acopio vertical. En cualquier caso se deberá contar con las hojas de seguridad (MSDS) de cada una de las sustancias presentes en la obra.

Mamposterí­a y prefabricados

Su almacenamiento se realizará en sitios cercanos a los frentes de obra, para facilitar su traslado. Estos materiales deberán estar señalizados.

Tras un periodo de lluvia intensa el suelo sobre el que se apoyan equipos de trabajo o medios auxiliares (como andamios o escaleras) puede quedar anegado o inestable, por lo que deberán adoptarse medidas de seguridad para evitar que estos equipos vuelquen, basculen o se desplacen intempestivamente por pérdida de estabilidad.

Cuando se producen precipitaciones intensas se produce de forma considerable una disminución de la visibilidad, que afecta a la percepción de las señales y del entorno. Otro de los efectos derivados de las precipitaciones es que el terreno por el que transitan los trabajadores se vuelve resbaladizo, especialmente si, además, circulan vehí­culos, incrementando el riesgo de caí­das. Para evitarlo, se debe proporcionar a los trabajadores calzado adecuado.

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Cuidados para obras de construcción ante las lluvias

Para cuidar una obra de construcción durante la época de lluvia, es importante tomar las siguientes medidas:

Proteger las áreas expuestas

Cubra las áreas abiertas de la construcción con lonas impermeables o toldos para evitar que la lluvia directa afecte los materiales y las estructuras.

Mantener el drenaje despejado

Asegúrese de que los sistemas de drenaje estén limpios y libres de obstrucciones para permitir que el agua fluya correctamente y no se acumule en áreas no deseadas.

Proteger las superficies de trabajo

Cubra los materiales y herramientas con lonas o plásticos para evitar que se mojen y se dañen. Almacenarlos en lugares secos y elevados puede ser una opción adicional.

Controlar la erosión del suelo

Implemente medidas para prevenir la erosión del suelo, como la colocación de barreras de contención y la revegetación de áreas expuestas con césped u otros tipos de cubierta vegetal.

Monitorear las filtraciones

Realice inspecciones periódicas para detectar y reparar cualquier filtración de agua en techos, paredes y ventanas. Esto ayudará a prevenir daños mayores y la formación de humedad.

Mantener un programa de limpieza

Elimine regularmente el agua estancada de las áreas de trabajo y de las zonas donde se almacenan los materiales para evitar problemas de humedad y proliferación de insectos o plagas.

Programar adecuadamente las actividades

Considere el clima y las previsiones meteorológicas al programar las actividades de construcción. Si se espera un periodo prolongado de lluvias intensas, es posible que sea necesario reprogramar algunas tareas o tomar precauciones adicionales.

Mantener la comunicación

Mantenga una comunicación constante con el equipo de construcción y proveedores para coordinar las acciones necesarias durante la época de lluvias y tomar decisiones informadas en caso de condiciones climáticas adversas.

La lluvia puede afectar negativamente una construcción al causar filtraciones, erosionar el suelo, generar humedad, dañar la cubierta y promover el crecimiento de vegetación indeseada. Por ello, es importante tomar medidas de protección y realizar un mantenimiento adecuado para preservar la integridad de la estructura.

 

Medidas preventivas en trabajos con lluvia

Los trabajadores de una obra solo deben emplear equipos de trabajo que sean seguros para el uso previsto, por lo que el empresario debe asegurarse de que, por diseño o por caracterí­sticas constructivas, el equipo seleccionado sea adecuado para el trabajo a realizar, incluyendo las influencias externas a las que estará sometido, como puede ser la humedad por efecto de la lluvia o granizo.

Los equipos de protección individual empleados deben estar fabricados de materiales aislantes e impermeables que impidan que la ropa se humedezca. Del mismo modo, es importante emplear unas buenas botas que eviten la entrada de agua, pero lo más importante es que tengan suela antideslizante en terrenos inestables para evitar caí­das y resbalones.

En caso de ser necesario trabajar con equipos eléctricos, hay que tener en cuenta que la lluvia o cualquier otra precipitación como granizo, llovizna, rocí­o o escarcha, pueden reducir drásticamente el aislamiento de los equipos utilizados. Para evitar daños a los trabajadores, la norma establece que, en caso de tormenta, lluvia, viento fuerte o cualquier otra condición que dificulte la visibilidad o la manipulación de las herramientas, los trabajos deberán prohibirse o suspenderse.

Además, es importante tomar precauciones en caso de realizar trabajos en espacios confinados. En estos espacios, es necesario prever circunstancias especiales como una inundación por efecto de lluvias intensas. Por ello, es importante planificar el trabajo considerando las previsiones meteorológicas que pueden ocasionar un cambio de nivel por efecto de aguas pluviales y el trazado de las instalaciones, ya que las lluvias pueden originarse lejos del lugar de operación y, sin embargo, afectar las instalaciones donde se está trabajando.

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